Lima.- El bruxismo es una condición caracterizada por el rechinamiento y apretamiento severo involuntario de los dientes durante el día y con más frecuencia en la noche. Según una investigación publicada en la revista de la National Library of Medicine, el 31,4% de las personas ha padecido bruxismo alguna vez en su vida, mientras que el 8% asegura tener bruxismo frecuentemente.
“El bruxismo no solo afecta la estructura dental, sino que también puede desencadenar una serie de problemas de salud bucal y general. Es fundamental que las personas sean conscientes de los signos y síntomas para buscar atención temprana para evitar consecuencias lamentables”, afirma el Dr. Ítalo Funes Rumiche, exdirectivo del Colegio Odontológico del Perú.
El estrés, la ansiedad y la depresión son los factores de riesgo más comunes que influencian en el bruxismo. Además del uso de sustancias psicoactivas (cafeína, alcohol, etc.) y desordenes del sueño, también representan factores de riesgo asociados.
Entre las consecuencias del bruxismo no tratado existen diversas afecciones, entre las cuales destacan:
- Desgaste dental: El constante rechinamiento de los dientes puede causar un desgaste significativo del esmalte, debilitando los dientes y aumentando la susceptibilidad a caries, fracturas e infecciones.
- Dolor muscular: El esfuerzo excesivo de los músculos de la “masticación” puede provocar dolor y rigidez, afectando la capacidad de masticar y hablar con normalidad.
- Dolores de cabeza: La tensión muscular generada por el bruxismo puede irradiarse a la cabeza, causando frecuentes dolores de cabeza, especialmente al despertar. Esto también se produce en los músculos cervicales generando dolor de cuello.
- Problemas en la Articulación Temporomandibular (ATM): La presión constante sobre la mandíbula puede llevar a disfunciones en la ATM, generando dolor, chasquidos (ruidos) y dificultad para abrir y cerrar la boca.
- Trastornos del sueño: El bruxismo, a menudo relacionado con el estrés y la ansiedad, puede interrumpir el sueño, afectando la calidad de vida y el bienestar general.
“El bruxismo es una condición multifactorial que requiere un enfoque integral para su tratamiento. Desde protectores bucales hasta técnicas de manejo del estrés, existen múltiples opciones para ayudar a los pacientes”, añade el Dr. Funes.
Recomendaciones para manejar el bruxismo
- Uso de protectores bucales: Consultar con un especialista en salud bucal para la fabricación de un protector bucal personalizado que se use durante la noche, puede ayudar a prevenir el desgaste dental y aliviar la presión en la mandíbula.
- En casos severos se deben aplicar técnicas quirúrgicas mínimamente invasivas en la ATM para aliviar sintomatología y evitar que las alteraciones se agraven.
- Revisión dental regular: Mantener una rutina de visitas periódicas al odontólogo permite la detección temprana y el manejo adecuado del bruxismo, evitando complicaciones mayores.
Finalmente, el especialista sostiene que es importante concientizar sobre esta condición y también mantener una buena salud bucal con el uso una buena pasta dental fluorada, cepillos interproximales, hilo dental y enjuagues bucales con antisépticos como el cloruro de cetilpiridinio (CPC).