El cáncer de mama se ha consolidado como una de las principales causas de muerte en mujeres a nivel global. Según el último informe del Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades (CDC Perú – MINSA), esta neoplasia, que se origina en las células del tejido mamario, reportó 3,201 casos de cáncer de mama en mujeres, durante el primer trimestre de 2024. La tendencia sugiere que para diciembre de este año, el número total de diagnósticos podría alcanzar los 20,000 casos.
El cáncer de mama, ha cobrado notoriedad por su agresividad y rápido desarrollo. Según el Instituto Sueco de Economía de la Salud (IHE), cada día cuatro mujeres en Perú reciben este diagnóstico, lo que subraya la necesidad urgente de un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado. En términos de edad, un estudio publicado en BMJ Oncology reveló que los diagnósticos de cáncer en menores de 50 años han aumentado un 79% desde 1990 en todo el mundo, lo que refuerza la importancia de repensar las estrategias de prevención y detección, adaptándolas a las diferentes franjas etarias.
El Dr. Luis Sánchez, oncólogo del Hospital Santa Rosa, señala que el aumento de casos, particularmente entre adultos jóvenes, ha generado gran preocupación y se atribuye a múltiples factores como el estilo de vida moderno, marcado por un mayor estrés y menor actividad física. En el país, la causa principal lamentablemente sigue siendo la falta de diagnósticos y atención oportuna que no permiten identificar casos en etapas más tempranas.
Al respecto, el Dr. Sánchez destaca la prevención como un elemento crucial en la lucha contra el cáncer, enfatizando la importancia del ejercicio físico y una dieta equilibrada para mitigar el riesgo. Además, resalta que es fundamental realizarse chequeos oncológicos anuales, incluso si no se presentan síntomas, ya que el cáncer en sus primeras etapas a menudo no muestra señales evidentes.
“En la mayoría de los pacientes, el cáncer en estadios tempranos no presenta síntomas, por lo que es clave la visita al médico para realizar controles oncológicos cuando uno está sano. Muchos pacientes se realizan chequeos cardiológicos regularmente, pero cuando se trata de un control oncológico, aumenta el nivel de estrés debido al miedo al resultado. Es importante entender que el paciente asintomático debe hacerse un chequeo anual según su edad, antecedentes y género”, comentó el Dr. Sánchez.
Finalmente, el especialista resalta la necesidad de un diagnóstico y tratamiento oportuno, así como la importancia de la prevención y la atención médica continua. El cáncer de mama no es solo una preocupación médica, sino un desafío social que requiere un enfoque integral, abarcando desde la promoción de estilos de vida saludables hasta la mejora en la accesibilidad y calidad de los servicios de salud.