Paola Arapa
Lima.- El cáncer de próstata es la primera causa de mortalidad masculina en el Perú, y según cifras del MINSA registra cerca de 2,000 fallecimientos al año en Lima. Por ello, resulta importante conocer prácticas de prevención y los principales síntomas que permitan una detección temprana y la atención médica respectiva.
Lo primero que debemos saber es que la próstata es la glándula que produce el líquido seminal que nutre y transporta el esperma, por lo que su funcionamiento resulta fundamental para las tareas reproductivas. Esta glándula se divide en dos lóbulos, el izquierdo y el derecho, los mismos que se pueden ver comprometidos cuando se desarrolla un cáncer.
El Dr. Alejandro Figueroa Director Médico de ALIADA Centro Oncológico, brinda algunos consejos para estar atentos a los síntomas más comunes de esta enfermedad. Sin embargo, es importante considerar que el cáncer de próstata también puede ser asintomático, sobre todo en su primera etapa. Es recomendable agendar una cita médica en caso se presenten los siguientes síntomas:
- Problemas para orinar.
- Disminución en la fuerza del flujo de la orina.
- Sangre en la orina.
- Sangre en el semen.
- Dolor de huesos.
- Pérdida de peso espontánea.
- Disfunción eréctil.
“Ante la presencia de alguno de estos síntomas es necesario hacer una biopsia para determinar si es que se trata de un proceso cancerígeno. Además, que la hiperplasia de próstata, es decir su hinchazón, no necesariamente se diagnostica como cáncer de próstata, por eso es relevante hacer un examen más profundo a través de una biopsia, en la que se analiza el tejido a nivel microscópico”, señala el Dr. Figueroa de ALIADA Centro Oncológico.
En caso se detecte cáncer, este se divide en cuatro etapas que se diferencian por la extensión de la afectación en los tejidos u órganos aledaños. Por su lado, el especialista en oncología explica que “en la etapa 1, el cáncer está presente en uno de los dos lóbulos de la próstata; en la etapa 2, se encuentran comprometidos los dos lóbulos; en la etapa 3 el cáncer se ha extendido a la vesícula seminal y en la etapa 4, ya se ha comprometido la vejiga, el recto, y hay un mayor riesgo de metástasis”.
Cuando el cáncer es detectado en la primera etapa puede ser curado con tratamientos oncológicos. Si bien ha existido cierta resistencia al examen de tacto rectal, sigue siendo una alternativa viable como evaluación preventiva que hoy se complementa con otras como el análisis de antígeno prostático específico (SPA por sus siglas en inglés), donde se extrae una muestra de sangre para detectar la presencia de esta sustancia, que la próstata produce naturalmente y que, en cantidades anormales, podría indicar la presencia de alguna infracción, inflamación o cáncer.
Complementando los chequeos preventivos, es recomendable la ingesta de alimentos saludables, ricos en vitaminas y minerales, como frutas y verduras, el constante ejercicio para evitar el desarrollo de esta enfermedad.
